Hemos estado ensayando La pérgola de las Flores ,con sentimientos contradictorios . Hay cambios en el elenco .Un elenco que estaba afiatado ,que con esntusiasmo y mística profesional disfrutaba poner en una realidad escénica esta obra que de tan clasica parece que estuviera en la piel y el inconciente colectivo chileno.Sus canciones repetidas en colegios en innumerables experiencias fonomímicas de nuestros niños que han permitido que padres y abuelos chochos los aplaudan.
Algo sucede con esta obra . En todas las presentaciones que hemos hecho ,el público aplaude de pie. Emocionado.Y nosotros como interpretes también recibimos esa emoción como una gran ofrenda a nuestro trabajo . Hay personajes que tienen mas presencia , y actores cuyo nombre es más conocido ,pero es todo el elenco el aplaudido .Es la magia del relato que toma vida con cada uno y que se convierte en una comunión con los espectadores ,un experiencia de ese presente irrepetible que se recrea, y se guarda otra vez en la memoria
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